domingo, 14 de marzo de 2010

A la hora que escribo esto, ha transcurrido exactamente una semana desde que vi a Coldplay. Lo único que puedo decir es que, sin duda, han sido los dos conciertos más emotivos y emocionantes que he presenciado, los mejores. Coldplay me empezó a gustar hace 10 años, aun recuerdo la primera vez que vi el video de 'Yellow' cuando MTV era MTV y la manera en la que me atrapo la canción, se convirtió en el soundtrack de mi ultimo año de secundaria. Me considero alguien de mente abierta en muchos aspectos, incluido el musical, nunca he desdeñado un genero por el solo hecho de llamarse 'banda', 'pop' o 'reggaeton', creo que todo merece escucharse y me considero un amante de la musica, sin embargo, Coldplay toca una fibra muy sensible en mi, sus canciones reflejan pensamientos o sentimientos que experimento varias veces al día, lo hacían en el primer disco y lo siguen haciendo ahora, me sienta como me sienta, siempre hay una canción de ellos que puedo escuchar para acompañar a un momento o una situación en mi vida, yo se que no son el mejor grupo pero si que son mis favoritos. Estoy al tanto de que muchísima gente los descarta automáticamente como un grupo más de rock ligero sumamente comercial y hasta ahí, incapaces de ver más allá. Cuando yo los empece a escuchar eran 4 chavos que a duras penas llenaban aforos de 5,000 personas, que componían sobre la angustia, sobre el amor incondicional y sobre la esperanza. En esencia siguen siendo esos 4 chavos, solo que ahora llenan estadios a nivel mundial y venden millones y millones de discos pero cuando se ven sobre el escenario y se sonríen en complicidad por algo que solo ellos saben, siguen siendo esos 4 chavos que hicieron de Coldplay mi grupo favorito hace 10 años. Por eso, los conciertos de hace una semana fueron mis favoritos, por las canciones, por la comunión con el publico y por la imaginación que tienen para no hacer solo un recital de casi dos horas sino una experiencia en la que, como fanático, te ves involucrado y te hacen sentir parte de algo más grande, sientes que de verdad vale la pena el precio del boleto. Dejo algunas de mis partes favoritas del concierto que pude grabar, espero que les gusten.